AHD 206 - De fluidos, dictadores y duchas

Podium

Cuenta una antigua leyenda que las tijeras las inventó Ulises cuando, por no tener con qué cortar las cuerdas con las que el Minotauro le apresaba —y con todas las ferreterías cerradas—, pergeñó tan útil instrumento con los escasos materiales de que disponía. Algunos autores dudan de la veracidad de la historia, pero ¿sabes qué?, nosotros dudamos de los autores, así que estamos empate. Dicho queda, pulsa un play tajante y apoya a Ulises, porque… ¡AQUÍ HAY DRAGONES!

Más episodios

AHD 228 - De cocidos, pelusas y bichos

Son incontables las veces en que nos habéis pedido que hablemos de Tolstoi. Rara es la semana en la que a nuestros estudios no llegan cientos de cartas exigiendo que al menos uno de nosotros hable cuanto antes de Tolstoi. Más raro aún es el día en que alguien no nos para por la calle para pedirnos un poco de Tolstoi.  Si nos conoces bien, seguramente sepas que tampoco hoy hablaremos de Tolstoi. No sabemos, francamente, quién es Tolstoi.  Así que dale al play sin miedo a la decepción, porque seguramente no habrá Tolstoi en el programa, pero, a cambio... ¡Aquí hay dragones!

AHD 226 - De orígenes, ultrajes y horizontes

¡Volvemos! Si nos llegan a decir en agosto que un día sería septiembre, no habríamos dado crédito. Nos habríamos mesado las barbas mirando a un lado y a otro con mirada descreída. Y nos habríamos equivocado al dudar. Porque ahora mismo septiembre es de una rotundidad inapelable, como es septiembre en general, inevitable y, sin embargo, inesperado. El caso es que volvemos a pedirte que le des al play y nos sorprendas (o así) otra vez, porque… ¡AQUÍ HAY DRAGONES!

AHD 224 - De ocho cosas fresquitas ocho.

Nos estamos marchando. Hemos ordenado el maletero del coche, revisado la presión de las ruedas, cerrado el gas de casa, hablado con el vecino que nos riega las plantas y bajado a comprarnos un bañador con la intención de no quitárnoslo hasta septiembre. Lo tenemos todo hecho, menos lo de pedirte que vuelvas cuando volvamos, así de interesados estamos (y somos). Sólo nos resta pedirte que le des al play, tan fresquitamente, como sólo tú sabes hacerlo, porque… ¡AQUÍ HAY DRAGONES!