Podium
En este episodio de Crímenes de odio, exploramos uno de los casos más estremecedores de violencia por prejuicio en Argentina: el lesbicidio ocurrido en Buenos Aires que sacudió a la opinión pública y visibilizó el odio hacia las identidades disidentes.Con la participación de la periodista y escritora Luciana Peker, analizamos el contexto social, judicial y político que rodea este crimen, y cómo las estructuras del poder fallan —o directamente ignoran— a quienes viven en los márgenes. Una historia que no solo denuncia, sino que exige memoria, justicia y reparación.
Las imágenes de dos jóvenes agrediendo y quemando viva a una mujer sin hogar que dormía en un cajero automático en Barcelona causaron un gran impacto social. Rosario había tenido una vida aparentemente normal, hasta que una serie de circunstancias la hicieron acabar en la calle. Este crimen visibilizó el fenómeno del sinhogarismo, la violencia invisible que sufrían las personas sin techo, y el problema estructural de fondo. En este episodio contamos la historia de Rosario y lo que significó este trágico y cruel asesinato.
En 2013, un rapero griego era asesinado de una puñalada en el corazón por un grupo neonazi. Varios miembros del partido Amanecer Dorado llevaban tiempo protagonizando numerosos episodios violentos contra personas migrantes y oponentes políticos. La sociedad griega se organizó y empezó a combatir a los neonazis en cada rincón del país. La implicación de varios miembros del partido en este crimen llevó a su cúpula a prisión, acusados de formar parte de una banda criminal. Esta es la historia de cómo se los derrotó, tanto en los tribunales como en las calles.
La violencia de los ultras neonazis en el futbol español llegó a su cima en 1998, cuando un grupo de aficionados de la Real Sociedad fue víctima de una cacería que acabó con el asesinato de uno de ellos. El crimen de Aitor Zabaleta y La lucha de su familia y de su entorno porque se hiciese justicia se convirtió en un símbolo. Puso sobre la mesa el problema de los neonazis que campaban a sus anchas en los estadios españoles, y la complacencia de algunos clubs con estos grupos.