El trabajo de los profesionales en una unidad de cuidados paliativos es inusual dentro de la medicina: no trabajan para curar, trabajan para cuidar. Porque saben que se van a tener que despedir de todos sus pacientes.
La multinacional alemana anunció el mes de diciembre el cierre de su planta en Esquíroz, con 655 empleados. Comunicará su decisión definitiva el próximo 16 de junio. Un reportaje de Joan Gimeno.