Episodio 21 - Contra los triunfadores

Podium

Pero exactamente, ¿qué es triunfar? ¿Triunfas de verdad si el resto no sabe que has triunfado? ¿Hasta qué punto merece la pena sacrificar nada para triunfar? Y una vez has triunfado, ¿qué demonios haces? ¿Triunfar todavía más? Analizamos los pros y los contras de esta cosa tan tramposa y maleable que es el triunfo ahora que, tras ganar un Ondas, hemos triunfado nosotros.

Más episodios

Episodio 27 - Contra la familia

Hablar mal de tu familia es como hablar mal de ti mismo. Al final, eres lo que eres gracias (o a pesar) de ellos. En este episodio, nos lanzamos a criticar a la familia tradicional y abogamos por las familias escogidas. También nos planteamos si es posible salir de tu familia (y que tu familia salga de ti) o si la familia es nuestro propio régimen totalitario. Decía Tolstói eso de que todas las familias felices se parecen, pero las desdichadas lo son a su manera. Nosotros pensamos que todas las familias de los fachas se parecen, la verdad, pero no sabemos si son felices.

Episodio 26 - Contra la salud mental

Contra la salud mental: La salud mental se ha vuelto mainstream. Hablamos de ello en los bares, lo vemos en televisión y lo escuchamos en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, en Arsénico caviar nos preguntamos cuánta preocupación real hay y cuánto hay de pura impostura. Si la salud mental no se habrá convertido en uno más de los muchos tentáculos del capitalismo, que ofrecen velas y cremitas en nombre del autocuidado en lugar de verdaderas soluciones. Es el problema del mainstream. Que algo que debería ser importante se banaliza, se caricaturiza y se convierte en frasecita de Mr. Wonderful. Se vuelve pop. Y entonces ya no hay stop.

Episodio 25 - Contra la vergüenza

De todas las emociones humanas, la vergüenza es la más inservible y absurda de todas. Algo así como la Pablo Motos de las emociones. En Arsénico Caviar exploramos y analizamos todas sus variantes (como la vergüenza de clase, la de género o la de identidad sexual) para llegar a una conclusión: la vergüenza es una herramienta de control que mantiene a las personas en los márgenes, precisamente, en los márgenes. ¿Para qué sirve la vergüenza? Para absolutamente nada. 