Podium
Una noche, Alejandro Amenábar escuchó unos pasos por el techo y decidió escribir una película de terror. Seis meses después, Alejandro voló a Nueva York para reunirse con Nicole Kidman, Tom Cruise y Harvey Weinstein. Así comenzó el sueño español.
Arranca el rodaje y los americanos intentan detenerlo: la niña no les gusta, hay que cambiarla y coger otra. Los españoles se plantan. Y la niña, lejos de agradecer esa confianza en ella, se rebela y se niega a aprenderse sus diálogos. Nicole, por su parte, continúa con sus poblemas de rodilla y con una cojera que, según algunos, resulta un poco sospechosa...
Nicole Kidman aterriza en Madrid con una sonrisa, tres pelucas carísimas y 34 sugerencias de cambios de guion. Y con “sugerencias” quiere decir “exigencias”: o Alejandro acomete esos cambios o Nicole coge las maletas y se vuelve a Los Ángeles.
Y por fin llega Tom Cruise. Los españoles se lo pasan bomba con la llegada de los americanos, que preguntan a qué hora se hace la siesta en el rodaje, alucinan con que haya churros, cocido y cachopo en el cátering y se quejan de que la mayoría del equipo no hable inglés. Pero claro, tienen que encontrar la manera de entenderse...