Quienes no creemos en el Más Allá, en cambio, aspiramos solamente al descanso eterno y pacífico, sin despertares bruscos ni controles de inmigración a las puertas del Cielo. Aspiramos a un sueño dulce e ilimitado. Eso que deseamos a nuestros difuntos.
Aimar Bretos explica por qué el juez del Supremo Leopoldo Puente, que investiga a Ábalos, Cerdán y Koldo, pide investigar los pagos en efectivo en el PSOE